Tontería XXVII.
La
ecuación de mi vida.
En la
ecuación de mi vida, yo busco también despejar la x, pero qué difícil es. Resulta más
arduo el ascenso que cuando resolvía en la Escuela Secundaria.
Tenemos que considerar los factores, eliminar los
exponentes, sumar y restar, multiplicar y dividir, simplificar y, finalmente,
aislar la incógnita, que en la vida es lo más complicado; ¡ah!, y luego de
resuelto el enigma, buscar aplicación a la solución encontrada.
Tontería XXVIII.
La
conciencia cósmica universal.
Luego
de estacionar su Vokswagen Sedan gris Oxford modelo 2003, de haber bajado de
él, de sentarse en una silla de director de cine, y de ingerir tres cervezas,
dos Miller y una Corona, en ese orden, de 325 mililitros cada una, el
matemático, físico, antropólogo, investigador y escritor Roberto Alcaraz
Espinosa tomó su computadora portátil (laptop),
abrió la calculadora científica, un programa de hoja de cálculo llamado Calc,
un procesador de palabras creado por el mismo Alcaraz, y en cuestión de minutos
definió el paradigma particular de la conciencia cósmica universal, el miércoles
02/01/2013 (dos de enero), a las 6:10 a.m., 80 metros al oriente de
la carretera 54, Guadalajara-Saltillo, en el municipio de Ixtlahuacán del Río,
Jalisco, muy cerca de las coordenadas 21º latitud Norte y -103.178º
(-103º 10’
40.8”)
longitud Oeste, en una zona arbolada, un cuasi
bosquecillo.
No hay más, es la solución
definitiva para casi todo, para el caos, para la entropía, incluso para los
enigmas del futuro y hasta para detener absolutamente el flujo del tiempo y los
neutrinos, y llegar al cero absoluto (0º K, cero grados kelvin).
Tontería XXIX.
Memito Guajardo se ahogó en Mazatlán.
Tontería XXX.
Mi
ascendencia vasca, española y amerindia.
Desciendo
de africanos, como toda la humanidad
Míticamente, desciendo de plebeyos
visigodos que llegaron a la
Iberia o Hispania desde unas tierras (hoy, en Ucrania),
situadas entre los ríos Dniéper y Danubio; también, de vascos (euskaldunak),
castellanos, leoneses, cántabros, extremeños, catalanes, y amerindios: nahuas,
sayultecas, toltecas, caxcanes, tecuexes y cocas.
Soy guadalajarense 100 por ciento, y jalisciense 110 por ciento.
Me considero afortunado al carecer de sangre celta, mora o árabe, hebrea, tarasca (purhépecha), y huichola (wixárika), todos ellos pueblos inferiores.
Los apellidos de algunos de mis antepasados son: Ochoa, González, Reyes, Corona, Ortiz-Liñán, Ávalos, González, Álvarez, Güízar, Bracamontes, Díaz, Ponce, Soto…
Tengo un parentesco lejano con el general jalisciense Ramón Corona Madrigal (1837-1889), gobernador de Jalisco durante los periodos: 01/03/1887-22/09/1887, 24/11/1887-17/03/1888, 01/04/1888-09/01/1889, 25/01/1889-21/03/1889, y finalmente 01/04/1889-11/11/1889, y un parentesco más lejano aún con el capitán español Alonso de Ávalos, quien arribó a la Nueva España en 1523; era natural de Medellín, Exremadura, y pariente de Hernán Cortés (1485-1547).
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